7 de enero de 2013


No hay afirmación que me parezca más injusta que esa que dice que una imagen vale más que mil palabras. Es verdad que muchas veces es cierto; pero, si nos ponemos a pensar en ello... ¿qué es lo que nos consuela, una imagen o las palabras? ¿Qué es lo que nos hace entender? ¿Qué es lo que nos alegra? ¿Qué es lo que nos hace sentir? ¿Qué nos entristece? No diríamos la verdad si dijéramos que solo imágenes, y tampoco la diríamos si dijéramos solo palabras. La realidad es que las palabras completan imágenes, y viceversa. Las ordenan, las adornan, las embellecen o las vuelven el arma más cruel.